Tres Trabajadores Reciben Casi $4 Millones en Compensación
Carmen Alarcón/EDLP
El Diario NY (Spanish) – 2009-06-18
Nueva York — Tres trabajadores indocumentados de la construcción recibirán $3,85 millones en compensación por accidentes laborales que sufrieron.
Durante la rueda de prensa en las oficinas de Tepeyac, en Manhattan, Joel Magallan, director ejecutivo de la organización, anunció ayer este logro para el sector y recalcó la importancia de que todos los obreros, sin importar su estatus migratorio, sepan que están protegidos por las leyes.
“Los indocumentados tienen las mismas protecciones y derechos que los ciudadanos cuando se accidentan en trabajos de construcción”, aseguró ayer Brian O’Dwyer, abogado defensor de la firma O’Dwyer & Bernstien, que representó a los dos mexicanos y al ecuatoriano.
La compensación de $3.8 millones mostró cómo estos accidentes cambiaron la vida de los tres hispanos por falta de protección, a pesar de que la ley estatal (240) obliga a empleadores a proporcionar equipos de seguridad.
El plomero mexicano de 33 años tiene quemaduras de tercer grado en todo su cuerpo después de que un tubo explotará en sus manos el 15 de diciembre del 2004 en Manhattan.
El afectado ha sido sometido a dos cirugías reconstructivas.
“No se puede ver al espejo por que se deprime, tiene pesadillas y no puede trabajar”, aseguró en conferencia de prensa el primo de la víctima.
Con dos hijos en su país natal, el mexicano recibirá $2.5 millones pero no le harán recuperar lo que tenía, la capacidad de trabajar, según declaró el primo.
“Me tuvieron que bajar del techo con grúa”, relató la segunda víctima, un ecuatoriano de 36 años, quien recordó estar a más de 36 pies de altura, con la cadera hecha pedazos cuando sus compañeros de trabajo levantaron más 400 libras de material que le cayeron encima para llevarlo al hospital el 14 de agosto del 2007.
Desde entonces no ha podido trabajar y recibirá $600,000 por el accidente ocurrido en una casa de Queens.
La tercera víctima, un mexicano de 52 años, recibirá $750,000 por las heridas que le causó una columna que le cayó encima en una demolición en Manhattan el 30 de junio, 2004.
“La mayoría de los indocumentados trabajan en condiciones peligrosas y no lo denuncian por temor a ser deportados. Pero no es así, acá está la prueba”, aseguró Magallan refiriéndose al mexicano que ganó el histórico caso del 2005 recibiendo $4 millones en compensaciones y quien ayer estuvo presente en la conferencia en solidaridad con los otros trabajadores.
“Yo era ilegal y aún así, se hizo justicia, nunca me escondí”, concluyó la víctima que cayó de un edificio a 30 pies de altura en el 2001 dejándolo incapacitado de por vida.